El pádel es un deporte de equipo para dos jugadores, donde la dimensión mental y relacional juega un papel tan importante como la técnica o la táctica. Dos ejemplos recientes ilustran hasta qué punto la actitud de un jugador hacia su compañero puede influir en la cohesión del equipo y, en consecuencia, en su rendimiento en la pista. Y es, obviamente, Romain Taupin, el análisis de PadelEconomía que nos explica las razones.

El ejemplo de Belasteguin-Coello

En una fotografía de sus primeros días juntos, Fernando Belasteguin – dieciséis veces campeón del mundo – se dirige a Arturo Coello, todavía tímido en aquel momento. Sus palabras reflejan un claro deseo de unión:

"Tú quieres ganar tanto o más que yo, no me pidas más perdón. Estamos juntos, y si metes diez bolas, te sigo apoyando. ¡Vamos Arturo!"

Esta mentalidad benévola y orientada a la confianza envía una señal fuerte: pase lo que pase, la unidad del equipo tiene prioridad sobre los errores individuales.

El ejemplo de Lebron: su compañero

Por otra parte, una escena reciente destaca Juan LebrónEl cuatro veces campeón del mundo reacciona tras la remontada de un rival. Sus palabras van dirigidas directamente a su compañero:

“Como siempre, como siempre… La volea del 5-3 a la red…”

En este caso, el fuerte reproche sitúa la culpa individual en el centro del discurso, creando una distancia entre los dos actores en lugar de apoyo.

La importancia de la mente colectiva

Estas dos actitudes, opuestas en forma e intención, nos recuerdan que el pádel se gana entre dos jugadores, y que la mentalidad de la pareja puede decidir un partido tanto como la calidad del juego. El apoyo, la confianza y el mantenimiento de la cohesión son factores esenciales del rendimiento. Por el contrario, señalar los errores puede debilitar la confianza mutua y reducir la eficacia general.

Tanto en el nivel más alto como en el pádel amateur, esta lección sigue siendo universal: la forma en la que nos comunicamos con nuestros compañeros determina a menudo el éxito de un equipo.

Franck Binisti

Franck Binisti descubrió el pádel en el Club des Pyramides en 2009, en la región de París. Desde entonces, el pádel forma parte de su vida. Se le ve a menudo recorriendo Francia cubriendo los principales eventos del pádel francés.